Gracias por hacernos crecer en esta 13ª edición

Hagamos balance de una 13ª edición que concentró el grueso de la programación entre el 11 y el 14 de julio. El festival, que este año ha cambiado de fechas, se ha expandido por las cuatro comarcas de las Terres de l’Ebre. Amposta, epicentro del festival, ha albergado la mayor parte de la programación: el magnífico salón del Casino ha ofrecido la música más transgresora, con actuaciones de Pierre Bastien o Tatsumi & Masako; la sala de baile de la Lira ha presentado electrónica y revisitación del pop, con directos memorables de Verde Prato, Odalie o los contundentes Blu Boi; el Casal de Amposta ha programado los shows audiovisuales de Novi_sad y Ryoichi Kurokawa o PoleTwo, y las noches de Eufònic se han celebrado al aire libre, en el Castillo de Amposta, y han contado con la energía y la pegada emocional de Infanta, Balma y Linalab Band, entre muchos otros. Todo ello, en espacios urbanos y de fácil acceso, que han permitido una fácil movilidad a pie durante los dos días centrales del festival.

Un punto y aparte merece el impresionante espectáculo de Playmodes en el Observatorio del Ebro en Roquetes, “Astres”, en una noche mágica con cerca de 250 personas boquiabiertas por los láseres apuntando a las estrellas. El festival también ha programado actividades en las localidades de Tortosa, Sant Jaume d’Enveja, Bot, Campredó, Miravet, Paüls, La Sénia, Deltebre, Gandesa y Ulldecona, tanto en los días centrales del festival, del 11 al 14 de julio, como en los del Pòrtic Eufònic, del 4 al 7 de julio.

Eufònic 2024 también se ha expandido a espacios naturales del Delta, con nuevos paisajes para las actividades del festival que se han impuesto como magníficos escenarios para la música, la poesía o la danza. Este es el caso del Embarcador de Balada, pedanía entre Amposta y Sant Jaume d’Enveja, o la barraca de l’Encanyissada, que han acogido programación tanto el sábado como el domingo, en horario de mañana y mediodía; la danza y la performance poética en el Bosc de Ribera, el paseo literario para hablar de la fragilidad del territorio hasta el Mirador de Migjorn, frente a la desembocadura del río, o la acción site-specific de Shoeg en un olivo centenario en La Sénia, entre otros.

La vinculación entre arte, ciencia, tecnología y la relación con el territorio ha sido uno de los ejes vertebradores de Eufònic 2024. Esta línea se ha visto reflejada en muchas de las 10 instalaciones artísticas de este año: la instalación sonora inmersiva de Edwin van der Heide en el Centre d’Art Lo Pati, que se puede visitar hasta el 28 de julio; la impresionante pieza de arte digital de Anna Rierola, inspirada en “El jardín de las delicias” de El Bosco; “Thalastasi”, el proyecto de ciencia y arte que habla de los microorganismos marinos; o la instalación sonora de insectos robóticos del madrileño Miguel Aparicio, que recrea el paisaje sonoro acuático y terrestre de diferentes espacios del Delta, entre otras.

Con el cambio de fechas, Eufònic se ha propuesto interrelacionar con otros festivales del territorio. En colaboración con Deltebre Dansa ha presentado el espectáculo de nueva creación del músico Tobia Tauber, el artista visual Yannick Jacquet, del colectivo AntiVJ, y los bailarines Ching Ying y BBoy Issue, en una impresionante pieza que llenó la carpa del festival; y en colaboración con la bienal Manifesta 15 Barcelona Metropolitana, la performance poética de Rosa Tharrats y Gabriel Ventura.


Eufònic Pro y el proyecto Co-vision

Eufònic Pro se ha impulsado y establecido como el encuentro de los profesionales de la cultura periférica en el sur de Cataluña, coproducido con la Escola d’Art i Cultura de la Diputación en Tortosa, y que este año ha supuesto un verdadero diálogo entre las diferentes sensibilidades y aproximaciones a la ciencia desde las artes, tanto desde el ámbito digital como el performativo, con más de 70 profesionales participantes.

Además, Eufònic ha iniciado este año un nuevo proyecto de cooperación en colaboración con siete festivales europeos, «Co-vision – Cartografiando el patrimonio natural», una iniciativa que tiene como objetivo cocrear y coproducir un modelo de contenidos culturales alrededor de los retos ambientales a través de una estrategia participativa cultural. El miércoles 10 de julio se presentó en la sede de IRTA La Ràpita la primera parte del proyecto, que se extenderá hasta 2026, en una jornada de debate con la participación de diferentes entidades del territorio como la Cofradía de Pescadores de San Pedro o la Comunidad de Regantes del Canal de la Derecha del Ebro, entre otras, así como artistas y ciudadanos con preocupaciones sobre la emergencia climática y sus efectos en un territorio tan frágil como el deltaico.

En Eufònic también se han presentado las primeras «colonias digitales», BotCamp, un ‘stage’ de tres días en la Terra Alta donde varios participantes han compartido conocimientos de la mano de cuatro mentoras, con un programa específico de actuaciones alrededor del código generativo, las automatizaciones en el arte y la omnipresencia de los bots.

¡Anotad la fecha!

Ya podemos anunciar las fechas para el próximo año, del 10 al 13 de julio de 2025, como siempre con una serie de actividades e inauguraciones previas que suponen una puerta de entrada a los días grandes del festival.