Es evidente que los chavales no se relacionan con la vida de la misma forma que se hacía hace dos o tres décadas. Un contexto con pocas garantías de futuro, hiperconectividad y tendencia a lo efímero han marcado a una generación que no espera que las cosas pasen y acuden al DIY (do it yourself, o “Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como”) de forma impulsiva. Profesiones tan inestables -y viscerales- como las del marco creativo requieren que nos cultivemos interiormente para no perder el norte y saber levantarnos después de cada caída. Los jovencísimos artístas de música urbana Kyne (que estará actuando esa tarde en Lo Sindicat) y Fransie Klaas nos aportan su experiencia al respeto en una mesa de debate participativa comisariada y moderada por Jordi Chicletol.