Eufònic no quiere ser solo un espacio de exhibición de nuevas propuestas artísticas, sino un lugar de encuentro entre creadoras experimentadas, creadoras ya formadas y creadoras principiantes: un programa formativo con una conexión intrínseca con el paisaje del Delta del Ebro y sus particularidades, presentando una serie de propuestas dirigidas, por un lado, a artistas y creadoras que buscan adquirir nuevos conocimientos o perfeccionamiento en sus campos de interés y, por la otra, a jóvenes y personas adultas no iniciadas. Un lugar de encuentro con la creatividad y el contexto como elementos vehiculadores.

En Eufònic Campus 2024 se vuelve a hablar de fonografía y paisaje con un taller imposible de ser vivido fuera del festival. La artista canadiense crys cole, que pone toda la atención en las delicadas texturas microsónicas de los ambientes sonoros mínimos que nos rodean, propone encontrar los límites de la audibilidad y la intencionalidad en el territorio. En este taller de dos días en colaboración con SGAE, la artista establecida en Berlin propone explorar las posibilidades que ofrece la escucha como una herramienta de composición; una escucha atenta y comprometida con la dimensión sonora más íntima e imperceptible del mundo así como con la conciencia y agencia del cuerpo del oyente. Será a lo largo de dos días: jueves 11 y viernes 12 en varios del Delta del Ebro.

Riccardo Massari, a quien habremos escuchado en Gandesa interactuando con una pianola, es titulado al Conservatorio Real de La Haya. Propone un taller el sábado 13 de julio a las 18:00 h en el Centre d’Art Lo Pati para niños y niñas junto a Maria Morera Casablancas dedicado a la composición musical con papel perforado, la técnica en la cual se basa el funcionamiento del piano mecánico.

María Castellanos y Alberto Valverde, artistas y tecnólogos, centran su práctica conjunta en las relaciones entre seres humanos, no humanos y máquinas, centrándose en el estudio de los límites sensoriales humanos y en la creación de complejos sistemas de comunicación interespecies entre humanos y plantas. Habrán estado dos semanas trabajando en pleno Delta y nos expondrán las experiencias, los resultados y qué esperan de todo esto viernes 12 de julio en la Escola d’Art i Cultura de Tortosa a las 10:10 h.

Los toques de sirena de las cooperativas arroceras han marcado el paso del tiempo durante muchas décadas, y la de la Càmara es la última que se conserva: reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial, es uno de las pocas señales que nos recuerda que vivimos en un mundo que, todavía, es a nuestra medida. Blanca Regina nos propone una acción participativa viernes 12 de julio a las 18:oo h que hablará de aquello que nos define como comunidad y de la importancia de preservar elementos así. Solo hace falta que lleváis vuestro móvil.